Los Ángeles Negros planean show único y homenaje masivo

Después de 36 años, ayer se reunieron cuatro de los miembros históricos bajo una premisa: "No somos enemigos".


Se apaga la cámara de una entrevista televisiva y Nano Concha, bajista histórico de Los Ángeles Negros que se retiró en 1992, simula pegarle un puñetazo a sus compañeros. "Ahora sí nos agarramos", bromea el músico y la risa está servida.

Es la instantánea que retrata la nueva vida de Los Ángeles Negros: aunque asumen las diferencias que por décadas fracturaron al conjunto más grande de la música romántica local, ahora pueden servir hasta para un chiste.

¿El motivo? Celebrar los 40 años del disco "Y volveré" (1969) y reunir a cuatro de los cinco miembros que dieron vida a la era más brillante del grupo, entre 1969 y 1973. Ayer, en las oficinas de EMI, Germaín de la Fuente, Luis Ortiz, Jorge González y el propio Concha volvieron a juntarse tras 36 años.

El plan apunta a un show único para octubre, en un sitio como Movistar Arena, acompañado de los artistas que recuperaron su obra, como Los Bunkers o Los Tres. Además, se grabará un DVD.

"Yo siempre expresé el ánimo de que esta reunión sucediera", recalca De la Fuente, que dejó al grupo en 1974, en pleno apogeo. "Yo nunca lo creí posible", responde González. Luego profundiza: "No se me pasó por la mente que algún día nos tendríamos que volver a ver, por la manera en que terminó todo. Me dolió muchísimo el final, sobre todo a los que teníamos la camiseta bien puesta. Pero aquí hay razones de amistad, de sentimientos y también económicas para volver. Mucha gente cree que somos enemigos y no es así".

"No creo que haya razones económicas, queremos celebrar", aclara el vocalista, demostrando que las opiniones encontradas siguen latentes.

El proyecto también quiere sumar al quinto histórico, Mario Gutiérrez, hoy radicado en México, dueño de la marca y que el fin de semana dijo a "El Mercurio" que dudaba de la actual potencialidad de los reunidos. "Estoy seguro de que con los días aceptará. Fue su primera reacción, pero no se va a negar a un homenaje", agrega Ortiz. "Podemos revivir nuestra historia. Si él dice que yo ya no canto bien, entonces Serrat no podría venir a Viña", teoriza De la Fuente.

Tres meses

Ese tiempo se tomará el conjunto para ensayar y concentrarse para el concierto.

Fuente: El Mercurio